Un estudio publicado en junio de 2013 en versión online de la revista Tobacco Control afirma que, en Estados Unidos, cada empleado fumador le cuesta a su empleador entre $2,885 y $10,125 dólares (promedio $5,816) más al año que lo que le cuesta un empleado no fumador.

El análisis se basa en estudios previos del sector privado que evalúan los costos relacionados con el ausentismo, la pérdida de productividad, los descansos para fumar y los elevados costos en salud de los fumadores. Se estima que el costo debería ser similar en el sector público. Los descansos para fumar representan el mayor costo ($3,077) seguido por los gastos de seguro médico ($2,056) que son mayores en los fumadores que en los no fumadores. El modelo permite a cada empleador calcular sus gastos y estimar sus propios costos.

Este estudio destaca también que los empleadores que brindan planes de beneficios a sus empleados (es decir que pagan un monto por año para su pensión) ahorran $296 por año debido a que los fumadores suelen morir a edades más tempranas.
Hace unos 10 años, el Centers for Disease Control and Prevention (CDC) estimó que la perdida por productividad y costos médicos en los Estados Unidos era de unos $3,400 dólares por año por fumador. Sin embargo, el reporte se enfocaba en los costos totales para la economía del país asociados con la mortalidad por enfermedades causadas por el tabaco sin tener en cuenta de manera específica los costos extras que se asumen los empleadores.

Referencia: Micah Berman, Rob Crane, Eric Seiber, Mehmet Munur. Estimating the cost of a smoking employee. Tob Control, 3 June 2013 DOI: 10.1136/tobaccocontrol-2012-050888